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Ubicado en Ciudad de Panamá el Cerro Ancón cuenta con una altura de 200 m.s.n.m. en su parte más alta y una extensión de 48 hectareas, formando parte del corregimiento de Ancon. Estuvo bajo jurisdicción de EEUU como parte de la Zona del Canal de Panamá. El nombre de "ANCON" es el acrónimo de la Asociación Nacional para la Conservación de la Naturaleza, principal organización ambiental de Panamá.Como dato curioso, el nombre de Ancón fue dado al primer barco que cruzó por el Canal en 1914. Inicialmente el Cerro sirvió como punto de vigilancia de los Españoles desde el año 1961 y posteriormente como proveedor de agua fresca a la nueva Ciudad de Panamá.
Bajo la antigua administración de la Zona del Canal (Comando Sur), tuvo un uso especificamente militar (Comunicaciones y Seguridad). Actualmente cuenta con una evidencia estructural no operativa, identificada como un Bunker, construido en el año 1942, el cual sirvió de refugio durante la Segunda Guerra Mundial ante un posible ataque militar al Canal.
Posee una excelente diversidad de Aves, Insectos y Plantas entre los que se pueden nombrar perezosos, armadillos, tucanes, caotíes y venados. En nuestra visita pudimos observar especies de arañas de importante tamaño y unos hermosos tucanes.
Para subir a la cima del Ancón se puede entrar por el Edificio de Administración del Canal o tomando la Av. de los Martires hacia el Puente de las Américas y a la derecha se encontrará la entrada al Cerro.
El recorrido de 2 Kilometros aproximadamente. Es totalmente asfaltado por lo que pueden subir los vehículos, solo que la vía es muy estrecha y se debe tener precaución. Si lo tuyo es entrenar es excelente para subir trotando, bajar y hacer nuevamente otra subida. Quemarás muchas calorías.
Una vez arriba se puede observar por un lado la Cinta Costera, incluyendo el tramo marítimo, el Casco Viejo y el Centro Financiero de Panamá con sus hermosos edificios. Por otro lado se puede observar las exclusas de Cocolí y Miraflores, el Puerto, el Aeropuerto de Allbrok y parte del Allbrok Mall así como también el Puente de las Américas y el Puente Centenario.
En la parte más alta se encuentra la Bandera de Panamá. Es del tamaño aproximado de una cancha de Baloncesto (15mts x 10mts) y se encuentra allí desde el 7 de Octubre de 1977 con la firma del Tratado Torrijos-Carter. Se mantiene izada las 24 horas los 365 días del año y se puede ver desde varios puntos de la Ciudad.
También se encuentra una estatua en honor a Amelia Denis de Icaza quien le diera vida al poema "Al Cerro Ancón" escrito en 1906.
De último y no menos importante quiero decirles que cuidemos mucho esta reserva natural. Juntos podemos contribuir por conservar nuestro planeta. Cuando vengas manténlo limpio...
Les dejo el Poema al Cerro Ancón .... que lo disfruten!...
Al Cerro Ancón, por
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Ya no guardas las huellas de mis pasos, ya no eres mío, idolatrado Ancón. Que ya el destino desató los lazos que en tu falda formó mi corazón. |
Cual centinela solitario y triste un árbol en tu cima conocí: allí grabé mi nombre, ¿qué lo hiciste?, ¿por qué no eres el mismo para mí? |
¿Qué has hecho de tu espléndida belleza, de tu hermosura agreste que admiré? ¿Del manto que con recia gentileza en tus faldas de libre contemplé? |
¿Qué se hizo tu chorrillo? ¿Su corriente al pisarla un extraño se secó? Su cristalina, bienhechora fuente en el abismo del no ser se hundió. |
¿Qué has hecho de tus árboles y flores, mudo atalaya del tranquilo mar? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ¡Mis suspiros, mis ansias, mis dolores, te llevarán las brisas al pasar! |
Tras tu cima ocultábase el lucero que mi frente de niña iluminó: la lira que he pulsado, tú el primero a mis vírgenes manos la entregó. |
Tus pájaros me dieron sus canciones, con sus notas dulcísimas canté, y mis sueños de amor, mis ilusiones, a tu brisa y tus árboles confié. |
Más tarde, con mi lira enlutecida, en mis pesares siempre te llamé; buscaba en ti la fuente bendecida que en mis años primeros encontré. |
¡Cuántos años de incógnitos pesares, mi espíritu buscaba más allá a mi hermosa sultana de dos mares, la reina de dos mundos, Panamá! |
Soñaba yo con mi regreso un día, de rodillas mi tierra saludar: contarle mi nostalgia, mi agonía, y a su sombra tranquila descansar. |
Sé que no eres el mismo; quiero verte y de lejos tu cima contemplar; me queda el corazón para quererte, ya que no puedo junto a ti llorar. |
Centinela avanzado, por tu duelo lleva mi lira un lazo de crespón; tu ángel custodio remontose al cielo... ¡ya no eres mío, idolatrado Ancón! |
Panamá, 1906 Del libro: Hojas Secas. 1927 |
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